MIENTRAS EN ARGENTINA EL BIODIESEL IMPLORA PIEDAD, EN BOLIVIA APUESTAN A EXPORTARLO AL MUNDO

El lamentable papel de los políticos que prometen y no cumplen al sector del biocombustible extender la ley que obliga a las petroleras a hacer algo que ellas tampoco cumplieron se contrasta con el de un Gobierno de la misma región, con los ideales similares al discurso peronista, en un país que a pesar de sus problemas piensa en grande.

El gobierno de Bolivia anunció que construirá plantas ecológicas de diésel y biodiesel para reducir las importaciones de combustibles líquidos, tal cual lo explicó el ministro de Hidrocarburos y Energía, Franklin Molina.


El funcionario subrayó que el objetivo es impulsar el proceso de industrialización para, a su vez, reducir tanto los gastos de comercio exterior como los subsidios estatales. Se estima que Bolivia gastará entre 1.000 y 1.200 millones de dólares en la importación de diésel en 2021 para el suministro interno.

El objetivo final es dar paso a la producción de biocombustibles de segunda generación a partir de desechos urbanos y productos agrícolas, agregó Molina, quien también dio a conocer detalles que indicaban que la planta de biodiesel comenzaría a operar durante 2024 y su construcción costará alrededor de 279 millones de dólares.

ARGENTINA ....BIEN GRACIAS

En paralelo, un gobierno nacional que mantuvo refugiado al ex Presidente Evo Morales y que tiene en las palabras el mismo discurso que la actual administración Andina que fuera electa en las urnas tras un golpe cívico militar de otra era, no pude plasmar en hechos las palabras que pregona.

De esta forma otra vez, Argentina, queda atrás de todos los países de la región, ahora en materia de Biocombutsibles, donde una industria de pymes que nació, creció y se desarrolló durante el Gobierno de Néstor Kirchner, hoy cierra sus puertas y sufre las promesas incumplidas y el desamparo de un Estado que prefiere el status quo de las petroleras, antes de la generación de trabajo digno y de calidad.

El gobierno que en las palabras emula palabras y legado de Néstor Kirchner y defiende los postulados de Evo Morales, finalmente decide no debatir la ley de promoción de los biocombustibles, promovida hasta por el mismo hijo del ex presidente fallecido.