POLITICA
QUE HARA MILEI CON EL SISTEMA ENERGETICO
Según un artículo publicado en La Mañana de Neuquén, el próximo gobierno a partir de 2024 enfrentará desafíos significativos en el ámbito energético en el corto plazo. Un consultor de la industria señaló que aunque el sector tiene un gran potencial, resolver diversas cuestiones complejas será fundamental para su desarrollo.
En este sentido, uno de los desafíos más apremiantes será la actualización de los precios de los combustibles y del valor del barril criollo. Esta actualización se vuelve crucial para incentivar inversiones en Vaca Muerta, ya que la brecha entre el precio del Brent y el barril local ha aumentado considerablemente, disminuyendo la competitividad de Vaca Muerta frente a otras cuencas globales.
Sin embargo, ajustar estos precios también podría aumentar la presión sobre los precios en surtidores, los cuales ya tienen diversos factores que podrían provocar aumentos importantes, como la inflación acumulada, el ajuste en los biocombustibles, posibles cambios en el tipo de cambio oficial y el eventual levantamiento de congelamientos impositivos en fechas próximas.
Además de la cuestión de precios, las petroleras están presionando por eliminar trabas en las importaciones de equipos de perforación y otros insumos, así como flexibilizar el cepo para permitir el giro de utilidades a sus casas matrices. Estos cambios regulatorios serían cruciales para atraer inversiones y poder expandir las exportaciones a largo plazo.
En cuanto al abastecimiento interno, un tema urgente es la ejecución de la reversión del gasoducto norte, sin la cual el norte argentino corre el riesgo de no tener suficiente gas durante el próximo invierno. Aunque el proceso licitatorio ya ha comenzado, los precios ofertados están por encima del límite establecido, lo que plantea la decisión de convalidarlos o iniciar un nuevo proceso, corriendo el riesgo de no cumplir con el plazo establecido por Bolivia para el cese de sus envíos ininterrumpidos en junio de 2024.
En el ámbito eléctrico, se destaca la necesidad de ampliar urgentemente la capacidad de transporte para evitar el estancamiento en la generación renovable.
Desde una perspectiva fiscal, el factor tarifario será crucial, ya que se proyecta un recorte sustancial de los subsidios energéticos en el próximo año para cumplir con los acuerdos con el FMI. Aunque se estima un recorte del 1,7% al 1% del PBI en subsidios energéticos según el Presupuesto 2024, algunos economistas advierten que este número no contempla todas las deudas del Estado con productoras de gas y generadoras eléctricas, lo que hace más complejo el escenario de recortes.
En resumen, estos desafíos energéticos constituirán una tarea ardua para el próximo gobierno, ya que será crucial encontrar soluciones a corto plazo para garantizar el abastecimiento interno, a la par que se buscan estrategias para fomentar la inversión y el desarrollo sostenible en el sector energético argentino.