TRABAJADORES DE LA AFIP ABREN EL DEBATE SOBRE EL IMPUESTO A LOS COMBUSTIBLES

Dentro de las discusiones que se están llevando adelante en el recinto de la Cámara de Diputados, sobre el nuevo proyecto de “Paquete Fiscal”, los dirigentes del sindicato de empleados jerárquicos del ente recaudador nacional buscan aportar sus conocimientos para futuras modificaciones de un tributo trascendente para el ámbito energetico.

La aplicación del componente impositivo de las naftas que el gobierno nacional decidió ejecutar en el último trimestre, tras varios años de congelamiento, llevó el precio en las estaciones de servicio a un incremento considerable que impactó no solamente en el bolsillo de los consumidores, sino también en el nivel de ventas del sector.

En este marco de situación y ante el avance de las modificaciones en materia fiscal que el Poder Legislativo está tratando en el Congreso a pedido del gobierno, surgieron las alertas entre los trabajadores de la AFIP, quienes llamaron la atención sobre el impacto de esta obligación en la población.

En una entrevista concedida a AGENDA ENERGETICA, Mariana de Alva, secretaria general de la provincia de Buenos Aires de la Unión Personal Superior de la AFIP (UPSAFIP), adelantó que el gremio está evaluando la posibilidad de replantear el impuesto a los combustibles líquidos. La dirigente sindical fundamentó esta consideración en la experiencia de los integrantes del sindicato, quienes entienden la importancia de que los tributos sean verdaderamente beneficiosos para los contribuyentes.

En su opinión, De Alva puso el foco en la justicia del impuesto a los combustibles líquidos en la Argentina. "Tenemos perfecta claridad de que el ICL es un impuesto fácil de cobrar y por eso nunca lo van a sacar", declaró. Además, señaló que este impuesto ha sido objeto de aumentos por parte del gobierno, lo cual afecta directamente a los ciudadanos.

Al ser consultada sobre la posibilidad de incluir este ítem en la reforma fiscal, la entrevistada indicó que actualmente no se está considerando eliminarlo. "En este proyecto no está contemplado el impuesto a los combustibles", afirmó. Explicó que la reforma se enfoca en bajar los impuestos a los grandes capitales mientras se carga más impuestos sobre las clases medias. “De esta manera, el impuesto a los combustibles se convierte en una carga adicional para la población”, aseveró.

De Alva enfatizó que UPSAFIP está comprometido en llevar adelante propuestas para una reforma tributaria que alivie la carga impositiva sobre la clase media. "Nosotros los trabajadores tenemos que ser los que llevamos adelante las ideas y propuestas de la reforma tributaria", destacó.

En ese punto, la gremialista se mostró dispuesta a abrir canales de diálogo con la dirigencia de las distintas ramas de los hidrocarburos para avanzar en reformas tributarias que favorezcan el desarrollo de esta actividad, a quien calificó como “generadora de empleo genuino”.

En cuanto al marco normativo del impuesto a los combustibles líquidos, De Alva mencionó que se encuentra principalmente regido por la Ley 23.966/91, junto con su decreto reglamentario y resoluciones posteriores de la autoridad impositiva. Sin embargo, remarcó que su origen se remonta a la Ley 11.638 de 1932, la cual estableció los primeros gravámenes sobre combustibles y lubricantes en Argentina.

Debido a la complejidad normativa actual, De Alva destacó la importancia de proporcionar una visión unificadora y sintética de las normas que rigen el impuesto a los combustibles. "Consideramos que el objeto primordial del trabajo consiste en otorgar una visión unificadora y sintética del conjunto de normas, armonizando la ley con sus modificaciones, reglamentación y normas complementarias", concluyó, demostrando la intención de que el Estado actúe para garantizar un sistema tributario equitativo y beneficioso para todos los contribuyentes.