CHINA EMPIEZA A RACIONAR EL COMBUSTIBLE EN UNA CRISIS ENERGÉTICA Y DE SUMINISTROS QUE YA ES GLOBAL

Tras el racionamiento de combustible en Reino Unido debido a la falta de conductores, China ha empezado a hacer lo mismo: el suministro de gasolina queda limitado a 1.000 yuanes (unos 134 euros) por cliente y día. No hay carbón.

La razón por la que China ha empezado a racionar el combustible en algunas estaciones de servicio -algo que afecta más directamente al sector de transportes- radica en el aumento de los costos al por mayor de la gasolina y el diésel.

En un escenario de crisis, el país asiático trata de estabilizar los precios del carbón (que escasea) para limitar el efecto que está teniendo también en el suministro de electricidad.

De hecho, los ciudadanos afectados por los apagones (incluso las empresas) están utilizando generadores de electricidad, que funcionan con diésel. Una bola de nieve que no para de crecer.

Según datos recogidos por el Financial Times, la gasolina y el diésel han crecido un 20 % en China en el último mes, animados por el aumento de precios del carbón.

La solución del Gobierno chino pasa por ampliar la producción en cientos de minas, además de importar carbón de Australia, evidenciando que el fin del uso de los combustibles fósiles y la descarbonización de la economía de aquí a unos años es tan solo una quimera.