ALERTAN SOBRE LA PRESENCIA DE MONÓXIDO DE CARBONO COMO EL “ENEMIGO SILENCIOSO”

Expertos en Seguridad e Higiene destacan que en las actuales circunstancias en la sociedad transita una pandemia, la atención se dirige a las medidas de prevención aconsejadas y que debemos se deben cumplir los protocolos disciplinadamente. Pero recuerdan que es preciso tener presentes los riesgos con los que se convive diariamente en establecimientos de manipulación de hidrocarburos.

Según el Licenciado Carlos Volpi, asesor en Seguridad e Higiene de la Federación de Entidades de Combustibles, el monóxido de carbono es un gas inodoro, incoloro, insípido, tóxico y muy inflamable, aunque no es irritante, por lo que su exposición puede pasar completamente desapercibida.

“Se genera por la combustión deficiente de sustancias como gas y gasolina, los cuales están presentes no solamente en las estufas o en los domicilios, sino que también en los automóviles con el motor encendido y sectores de la estación de servicio”, dijo Volpi.

MEDIDAS DE PREVENCION

En todos los aspectos, el especialista recordó que hay que cerciorarse de que todos los artefactos a gas que pudiese haber instalados funcionan correctamente. Para eso, es importante recurrir a un gasista matriculado que realice el chequeo y el mantenimiento en forma periódica, sobre todo si han estado mucho tiempo sin uso.

De la misma forma, llamó a ventilar adecuadamente los ambientes, evitar la utilización de braseros en ambientes cerrados y la calefacción con el horno a gas, especialmente en las oficinas de administración y sectores como los minimercados o sanitarios.

Aseguró el experto de FEC, que cada año, un gran número de personas pierde la vida accidentalmente debido al envenenamiento con este gas y los trabajadores de las expendedoras de combustibles, no están exentos de estos peligros.

​Explicó que si se respira, aunque sea en moderadas cantidades, el monóxido de carbono puede causar la muerte por envenenamiento en pocos minutos porque sustituye al oxígeno en la hemoglobina de la sangre. ​

“Una vez respirada una cantidad bastante grande de monóxido de carbono la única forma de sobrevivir es respirando oxígeno puro, debido al envenenamiento con este gas”, dijo y advirtió que las mujeres embarazadas y sus fetos, los niños pequeños, las personas mayores y las que sufren de anemia, problemas del corazón o respiratorios pueden ser mucho más sensibles al monóxido de carbono.

PROCEDIMIENTO FRENTE A UNA EMERGENCIA

Detalló que el tratamiento consiste en alejar a la persona de la fuente de exposición, y emprender medidas para asegurar su respiración, porque el oxígeno funciona como antagonista específico del CO y por esa razón se administra como tratamiento.

“Tiene una afinidad mucho más alta que el oxígeno por la hemoglobina de la sangre, formando un compuesto denominado carboxihemoglobina, que impide el transporte de oxígeno a las células, y por tanto el organismo no puede obtener la energía para sobrevivir”, comentó Volpi.

El asesor especial de los temas de seguridad ambiental del sector expendedor aconsejó que si se sospecha que alguien haya sufrido una intoxicación por monóxido de carbono, cuanto antes se actúe menor será el daño causado y más rápida y favorable la recuperación.

“Una vez que hemos detectado los síntomas, la víctima de intoxicación debe ser llevada cuanto antes a una zona al aire libre, el único tratamiento es la administración de oxígeno, La víctima de intoxicación debe ser llevada cuanto antes a una zona al aire libre”, aseguró.

No obstante, destacó algunas medidas de primeros auxilios que se pueden tomar en primera instancia para ayudar a una persona intoxicada por monóxido de carbono como avisar a los servicios de emergencia lo antes posible.

“Cuando llamamos es útil proporcionar información como edad, sexo y peso (aproximado) de la víctima, así como el estado en el que se encuentra, si está consciente, dormida y si tenemos más datos como el tiempo de exposición al gas”, sostuvo.


Comunicó que después de haber pedido la atención médica se debe proceder al rescate de la víctima, siempre asegurando la propia integridad, hay que evacuar al afectado de la zona tóxica y exponerla al aire libre.


en una segunda instancia dijo que se debe evaluar el estado general de la persona intoxicada y actuar en consecuencia. Si está consciente hacer que se siente y no haga esfuerzos mientras llega la atención sanitaria y si está inconsciente, pero respira, colocarla en posición lateral de seguridad.


“Si la víctima está inconsciente y no respira comenzar inmediatamente con maniobras de Reanimación Cardiopulmonar (RCP). En caso de que hubiera otra persona, una debe llamar a los servicios de emergencia mientras que la otra hace la RCP. Si se encuentra solo con la víctima, proporcione RCP durante un minuto, luego haga una pausa para llamar a emergencias y comunicar la situación (muy importante decir que la víctima no respira y estamos haciendo RCP). Después continuamos con las maniobras hasta que llegue ayuda médica”, alertó.

Reiteró Volpi que las intoxicaciones por inhalación de monóxido de carbono son más comunes de lo que la gente piensa, y afirmó que seguramente la mayor parte del personal conoce de riesgo que puede causar respirar una cantidad de monóxido de carbono, aunque sentenció la importancia de mantener las alertas y recordar siempre las recomendaciones de los organismos de salud.

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